LA VIDA COMO OFRENDA
Desde 1911, contaba nuestra Congregación de Siervas de María, con una espaciosa casa en Pozuelo de Alarcón, donde se retiraban las Hermanas mayores en busca de descanso y desde donde algunas de ellas salían gozosas, cada noche, a prestar su servicio de asistencia a los enfermos en dicha población.
En 1936, con motivo de la Guerra Civil, Pozuelo pasó a ser línea de fuego. Nuestra casa fue tomada y las Hermanas se vieron obligadas a dispersarse entre las familias conocidas, prohibiéndoseles la comunicación de unas con otras.
A primeros de diciembre la situación llegó a ser tan insostenible, que se vio la necesidad de evacuar urgentemente a las pocas personas que aún quedaban en Pozuelo.
Cuatro de ellas: Madre Aurelia, Sor Aurora, Sor Daría y Sor Agustina, reconocidas como Religiosas y sin negar en ningún momento su condición de Consagradas, fueron elegidas para el martirio.
MADRE AURELIA ARAMBARRI
Nació en Vitoria (Álava) y en ese mismo día 23 de octubre de 1866, fue bautizada en la Parroquia de Sta. María, recibiendo el nombre de Clementina.
Con 20 años ingresa en el Instituto, de las Siervas de María, imponiéndole el hábito Sta. María Soledad el 14 de noviembre de 1886. Efectuada su profesión, es destinada a Puerto Rico, pasando más tarde a Méjico donde le sorprende la Revolución.
En agosto de 1916 ya en España, es nombrada Superiora de Mataró, pasando así mismo por las casas de Alcoy y Barbastro.
En 1929, al crearse la Provincia de Madrid, es trasladada a la misma como Consejera Provincial. Tanto en la plena actividad de su vida, como al verse imposibilitada por una parálisis progresiva, es siempre su lema: “De Dios somos, no permitirá que nos pase nada malo, será lo que Dios quiera”.
SOR AURORA LÓPEZ
Nació en San Lorenzo (Madrid) el 28 de mayo de 1850. Tres días después, con las aguas bautismales recibía el nombre de Justa.
El 20 de marzo de 1874, ingresó en el Instituto. Contemporánea de Madre Soledad, refleja a lo largo de toda su vida el gran amor que profesa al Carisma del Instituto, compartiendo con las jóvenes que van entrando, su rica experiencia en nuestro ministerio.
SOR DARÍA ANDIARENA
Era natural de Donamaría (Navarra). Nació el 5 de abril de 1879; fue bautizada al día siguiente en la Parroquia de Ntra. Sra. De la Asunción con el nombre de Engracia.
Ingresó en nuestra casa de San Sebastián a los 23 años, haciendo su Noviciado en la Casa Madre (Madrid). Ya profesa, pasa por Zaragoza y Ciudad Real. Vuelve a la Casa Madre donde desempeña el cargo de Auxiliar del Noviciado.
Estas son las últimas palabras que de ella se conservan: “Somos en efecto Religiosas, pueden hacer de nosotras lo que quieran, pero yo les suplico que a esta familia (que nos ha acogido) no les hagan nada”.
SOR AGUSTINA PEÑA
Nació en Ruanales (Santander) el 23 de marzo de 1900, bautizada el día 25, recibe el nombre de Anunciación.
El 14 de diciembre de 1924 ingresa en nuestra casa de Tudela, tomando el Hábito en la Casa Madre el 4 de julio de 1925. Tras emitir sus votos es destinada a la casa de Pozuelo.
Al evacuar dicha ciudad huye a las Rozas donde acusada de ser Religiosa muere con 36 años el 5 de Diciembre de1936.