En la primera audiencia general tras el descanso del verano, Francisco invita además a participar en la jornada de ayuno y oración por la paz en Siria
El santo padre Francisco ha retomado el 04 de septiembre de 2013, las audiencias generales de los miércoles tras la pausa del mes de agosto. Un mes previsto para el descanso del pontífice en el que, aunque con menos compromisos en la agenda, ha seguido trabajando.
Esta mañana una gran multitud se ha reunido en la plaza de San Pedro para acompañarle y escuchar su catequesis. Jóvenes, grupos de parroquias, peregrinaciones de distintas partes del mundo, familias... Todos esperaban a Francisco en la plaza agitando sus banderas y animando la espera con cantos. El papa ha entrado en la plaza montado en el jeep blanco descubierto a las 10 de la mañana y durante media hora ha pasado por los pasillos saludando a los fieles, besando y bendiciendo a niños.
La de hoy ha sido la decimo quinta audiencia. En las catorce primeras - desde el 27 de marzo hasta el 26 de junio - han participado 825.000 fieles, tal y como informa la Prefectura de la Casa Pontificia. Este dato hace referencia solo a grupos y particulares que han enviado una petición de participación. Y al cual, por tanto, es necesario añadir el gran número de personas que cada miércoles acude a la audiencia general sin inscripción previa.
Ha pasado más de un mes, pero el santo padre ha querido hablar hoy sobre el viaje realizado en julio a Río de Janeiro en ocasión de la Jornada Mundial de la Juventud y ha dado las gracias a Dios porque todo ha sido posible por su providencia. Así como a Nuestra Señora Aparecida por acompañarles durante todo el viaje. También ha tenido palabras de agradecimiento para todas las personas que hicieron posible que este evento tuviera lugar. "¡Buena gente estos brasileños!", ha afirmado el papa Francisco.
Sobre el viaje a Brasil ha dado tres palabras clave: acogida, fiesta y misión. El pontífice ha señalado que por esta acogida "nacen uniones que permanecen sobre todo en la oración". Del mismo modo ha hablado de la fiesta subrayando que "sin el amor de Dios no hay verdadera fiesta". Y por último ha hecho referencia la misión, recordando que esta JMJ estaba marcada por un tema misionero 'id y haced discípulos a todas las naciones'. Y ha invitado a los jóvenes a "salir de vosotros mismo, de cualquier cierre para llevar la luz y el amor de Evangelio a todos ¡hasta los extremos periféricos de la existencia!".
Y por eso el papa Francisco ha interpelado a los jóvenes preguntándoles "¿Queréis ser esperanza?, ¿queréis ser esperanza para la Iglesia?". Les ha invitado a abrir las puertas hacia un nuevo mundo de esperanza y les ha pedido "tenéis que ser esperanza para todos nosotros". Finalmente les ha preguntado de nuevo"¿tenéis la valentía de acoger este desafío?". Los jóvenes presentes respondieron con fuerza un 'sí' y a coro, animados por el santo padre.
"Somos amados por Dios que es nuestro Padre y ha venido a salvarnos. Él siempre perdona porque es bueno y misericordioso" ha recordado Francisco.
A los peregrinos presentes de lengua española les ha dirigido estas palabras: "Saludo cordialmente a los peregrinos de lengua española, en particular al grupo de oficiales venidos desde Colombia, así como a los fieles provenientes de España, Argentina, México y los demás países latinoamericanos. Invito a todos a que la acogida, la fiesta y la misión vividas en Brasil no sean un mero recuerdo, sino el alma de nuestras vidas y comunidades. Gracias".
Al finalizar los saludos en las distintas lenguas, el santo padre ha hecho un llamamiento recordando que "el próximo sábado viviremos juntos una jornada especial de ayuno y de oración por la paz en Siria, en Oriente Medio, y en el mundo entero. Renuevo la invitación a toda la Iglesia a vivir con intensidad este día, y, desde ahora, expreso reconocimiento a los otros hermanos cristiano, a los hermanos de otras religiones y a los hombre y mujeres de buena voluntad que quieran unirse, en los lugares y en el modo propio, a este momento". "La paz comienza en el corazón", ha recordado el santo padre y a continuación ha invitado a los fieles a participar en la vigilia de oración que iniciará en la plaza el sábado a las 19 horas, para pedir a Dios el gran don de la paz. "Se alce fuerte en toda la tierra el grito de la paz" ha exhortado Francisco.
Palabras del papa Francisco en la audiencia de hoy: ¡Vayan, salgan de ustedes mismos para llevar la luz y el amor del Evangelio a todos, hasta los extremos periféricos de la existencia!'